Individuos en riesgo
Un grupo particularmente vulnerable a las IAAS son los pacientes con úlceras por presión. Estas personas tienen la piel comprometida, lo que proporciona un punto de entrada para que los microorganismos invadan sus cuerpos. Las heridas abiertas los hacen más susceptibles a infecciones que pueden transmitirse por contacto directo, superficies contaminadas o dispositivos médicos.
Según el informe de la OMS, las IAAS afectan a millones de personas a nivel mundial, y las consecuencias pueden ser devastadoras. Sorprendentemente, el 24% de los pacientes afectados por sepsis asociada a la atención sanitaria y el 52,3% de los que son tratados en unidades de cuidados intensivos sucumben a estas infecciones cada año. Las IAAS pueden ser causadas por una amplia variedad de patógenos y pueden propagarse a través de diversas vías, incluyendo el contacto con superficies contaminadas y dispositivos médicos.(1)